Los textiles tienen un valor más grande del que a menudo se reconoce. Cada prenda que desechamos lleva consigo recursos, historias y una huella ambiental que no desaparece al momento de tirarla.
Creemos que los textiles merecen segundas, terceras e incluso cuartas oportunidades.
Los materiales que otros ven como desechos, nosotros los vemos como un lienzo para la creatividad y la sostenibilidad. Telas desgastadas, retazos de mezclilla y prendas olvidadas son el punto de partida para diseñar nuevas chamarras y pantalones únicos. Este proceso no solo reduce la cantidad de residuos textiles que terminan en vertederos, sino que también rescata la artesanía y el valor del trabajo humano que se encuentra en cada fibra.